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Kaito por fin ha descubierto que Luchia es la sirena que había sido su primer amor, y ambos deciden profundizar en su relación.
Sin embargo, todo cambia cuando Kaito desaparece al viajae a Hawái para participar en un torneo de surf... ¡Comienza un nuevo arco de la serie que está rompiendo moldes!
En este tomo, conoceremos a un nuevo enemigo, Mikel, quien al empezar el tomo, intentará robar los fragmentos del espíritu a Seira para evitar que pueda nacer.
Por otro lado, tenemos a Kaito, quien se va de viaje a Hawái para participar en un concurso de surf, pero una misteriosa ola hace que desaparezca en plena competición, pero Luchia confía en que Kaito sigue vivo en alguna parte.
Kaito reaparece pero... no recuerda a Luchia. No recuerda nada entre ellos, ni tampoco parece recordar que ella es la sirena que le salvó la vida.
También conoceremos a Mikaru, una chica que está temporalmente dejando a Kaito vivir con ella mientras él se recupera del accidente, aunque Mikaru tiene intenciones amorosas con Kaito, lo cual hará a Luchia sentirse muy insegura al ver que Kaito no puede recordar todo lo que pasó con ella y teme que pueda enamorarse de Mikaru.
¡Y hasta aquí os puedo contar de este tomo! Es el principio de un nuevo arco, pero en mi opinión empieza todo demasiado rápido en comparación a cuando ha acabado la lucha contra Gaito; no ha habido nada entre medias sobre la vida de las sirenas ni nada, simplemente después de terminar con un enemigo, ha aparecido otro de golpe sin absolutamente nada de trama por medio, cosa que personalmente a mí, no me ha gustado mucho.
Puntuación:
¡Gracias por leerme!
