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Ficha técnica
Sinopsis
Para vengar la muerte de su hermano, Rangetsu abandona su condición de mujer y se hace pasar por hombre para servir como bestia sirviente a Tenyô, el cuarto príncipe. Rangetsu sospecha que el príncipe Kôgai pueda estar relacionado con la muerte de su hermano y se dispone a observarlo de cerca, pero resulta que el hermano de Kôgai... ¿es Tenyô?
Kôgai empieza a tantear a Rangetsu con el objetivo de provocar a Tenyô...
El corazón de Rangetsu late de alegría al oír las palabras de su señor. ¡El enfrentamiento entre dos príncipe de ideales distintos, y mucho más en el cuarto volumen de esta historia de fantasía!
Bueno, bueno, bueno, este tomo me dejó sin palabras. La historia no deja de subir de nivel, y con cada capítulo que pasa, los enredos en palacio se vuelven más intensos. Si ya estabas enganchado antes, prepárate, porque esto es como una montaña rusa de emociones.
Empezando por Rangetsu, nuestra protagonista sigue en su modo total de guerrera, pero en este tomo vemos una evolución muy fuerte en su carácter. No es solo la chica decidida que conocimos al principio. Aquí la vemos más vulnerable, más humana. La relación con Tenyô sigue avanzando, y ya no hay duda de que ambos se sienten atraídos entre sí. Lo que me encanta es cómo manejan esto: ninguno de los dos puede permitirse un romance tradicional, así que cada escena que comparten está cargada de tensión. El deseo está ahí, pero el deber pesa más. Rangetsu está completamente comprometida con su misión de venganza, pero no puede negar que Tenyô le está robando el corazón, y eso la tiene toda confundida.
Hablando de Tenyô, en este tomo lo vemos más firme en sus convicciones. Está dispuesto a enfrentar las injusticias de su reino, especialmente cuando se trata de los seres mitad bestia como Rangetsu. Lo que más me gusta es cómo él confía en ella de una manera que nadie más lo hace. Aunque ella es su guardaespaldas, en varias ocasiones es él quien la apoya y protege, tanto emocional como físicamente. Esa dinámica de "yo te cuido, tú me cuidas" me parece una maravilla.
Lo más impactante de este tomo, sin duda, son los enfrentamientos. Las batallas están a otro nivel. ¡Y no solo hablo de peleas físicas! Hay choques de ideales, de lealtades, de mentes. Rangetsu se ve forzada a tomar decisiones muy difíciles, aquí vemos cómo empieza a cuestionarse si su venganza es lo único que la define. Lo bueno es que no está sola en esto: Tenyô la apoya, y eso le da más fuerzas, aunque a veces ese apoyo también le genera conflicto interno, porque claramente no quiere que sus sentimientos hacia él la debiliten.
Otro punto que no puedo dejar de mencionar es cómo el tema de la discriminación hacia las bestias sigue siendo central en la trama. Este tomo profundiza mucho más en cómo el reino ha abusado de su poder sobre ellas, y cómo personajes como Rangetsu están dispuestos a desafiar ese sistema. ¡Es una crítica fuerte y muy bien llevada! Me gusta mucho cómo la autora balancea el romance con estos temas más profundos. No es solo una historia de amor prohibido, sino que hay todo un trasfondo de injusticias y luchas de poder.
Y, claro, el romance. ¡Ay, el romance! Si en el tomo anterior teníamos miradas cargadas de significado, en este las cosas se empiezan a poner más intensas. No quiero spoilear demasiado, pero hay momentos entre Rangetsu y Tenyô que te van a dejar con el corazón en la garganta. ¡Por fin! No es que tengamos escenas explícitas o algo así, pero esa tensión emocional y física entre ellos ya no se puede ignorar. Y lo mejor es que no se siente forzado, todo fluye de manera muy natural.
En resumen, este tomo es todo lo que podías esperar y más. La historia sigue creciendo en intensidad, los personajes están más complejos que nunca y el romance, aunque todavía contenido, está que arde. Si ya estabas enganchado, este tomo te va a dejar con ganas de devorar el siguiente inmediatamente. La mezcla de acción, política, y ese toque romántico hacen que cada página sea una maravilla.
Puntuación:
¡Gracias por leerme!
