Seguir leyendo »

Yuna se enamora por primera vez de un chico y no de uno de los príncipes de sus mangas. El afortunado es Rio, el mismo que no pudo declararse a Akari. Cuando este le confiesa su secreto, ella decide que no puede seguir ocultando lo que siente y se lo cuenta. La valentía de Yuna anima a Akari a tomar las riendas sobre un asunto con una persona de su pasado.
Yuna sospecha que la chica que Rio mencionó que quería y a la que no se le pudo declarar es Yuna, pero claro, no lo tiene seguro, aunque sus sospechas son enormes. Un día, estando los dos a solas, Rio le confirma que sí, que efectivamente, de quien está enamorado es de Akari, pero por su condición no puede siquiera comentárselo a ella. Aprovechando esto, Yuna decide confesarle a Rio que ella está enamorada de él, ya que, al igual que él se ha abierto con ella, Yuna sintió que no podía seguir escondiéndole eso.
Por otro lado, tenemos a Akari, quien ha comenzado a comportarse de una manera muy distante y fría con su hermano Rio para hacer que su madre no sospeche nada raro, pero claro, Rio tiene sentimientos y acaba siendo herido por el comportamiento de ella, ya que Akari no sabe absolutamente nada. Sin embargo, también empezaremos a ver algo más de sus sentimientos, veremos cómo decide pasar página y encuentra a alguien que le da una nueva esperanza.
Este tomo, al igual que el primero, me ha encantado. Esta historia me parece genial y sólo llevo leídos dos tomos, así que tengo muy buenas expectativas y estoy muy segura de que me va a encantar. Además, el estilo de dibujo es mucho más evolucionado que en obras anteriores de la autora y me parece absolutamente precioso, simplemente el tener la oportunidad de apreciar sus dibujos, ya me hace querer leer esta obra, pero encima, es que me tiene enganchada.
Puntuación:
¡Gracias por leerme!