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Iori por fin se ha reencontrado con su hermano Ibuki, a quien estuvo buscando durante mucho tiempo. Parece que han podido hacer borrón y cuenta nueva después de las expectativas frustradas del uno y del otro, pero...
Mientras tanto, tras escuchar la vedad a través de Mikage, el compañero de Airi en la peluquería, Yûki no puede ocultar cierta angustia a pesar de saber que Ibuki ya confía en ella.
¿Qué tipo de relación tienen realmente Iori y Airi según Ibuki? ¡En este tomo descubriremos el sabor agridulce del amor!
La relación entre Iori y Yûki sigue avanzando, y ella cada vez se siente más confiada junto a él, aunque en ocasiones aún tiene momentos donde todo le da bastante vergüenza. Pero Yûki sigue teniendo dudas sobre Airi, y es que no tiene muy clara la historia y su verdadera relación con los hermanos Sôma.
A sus oídos llega el rumor de que en realidad, Airi nunca estuvo enamorada de Ibuki, sino de Iori, así que con temor, acaba enfrentando a Ibuki cara a cara y le pide que le cuente la verdadera historia y le pregunta por qué, después de su vuelta, no ha querido ver a Airi...
Por otro lado, nuestro amigo Seno no se rinde, y es que ha decidido que va a ir a por todas en lo referente a Yûki y piensa aprovechar la más mínima oportunidad para intentar hacer que se enamore de él, le cueste lo que le cueste.
Y al final del tomo, nos dejarán con muuuuchas ganas de leer el siguiente, porque todos nuestros protagonistas acaban yéndose juntos de campamento... ¿qué podría pasar, con todos reunidos a la vez...?
No puedo esperar a leer el siguiente, la incógnita entre Airi e Ibuki me parece realmente interesante porque me da la impresión de que, vamos a verlos muy, muy cerca a los dos, y por otro lado, sé que Seno va a conseguir su momento a solas con Yûki, y quiero ver ya de ya la reacción de Iori, me ha encantado ese Iori tan territorial que se nos muestra en este quinto tomo.
Puntuación:
¡Gracias por leerme!
