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El padre de Kirino ha encontrado la carátula del juego erótico de Kirino y se ha enfadado con ella, queriendo registrar su habitación. Kyosuke, decidido a proteger a su hermana decide enfrentarse a su padre para no dejarle entrar en la habitación de Kirino, prometiéndole que él se encargará de vigilar a Kirino para controlar sus aficiones.
Después de esa escena, Kirino y Kyosuke mantienen una charla, sobre la opinión de su padre sobre las aficiones de Kirino, y ésta se niega a renunciar a ellas porque a su padre no le gusten, y cuenta por supuesto, con el apoyo de su hermano.

Después de la conversación de Kyosuke con su hermana, éste se enfrentará a su padre de nuevo, diciéndole que no tiene derecho a prohibirle a Kirino sus aficiones, que a ella le hacen ser muy feliz y le han hecho conocer a más gente con esos mismos gustos.
En este tomo también, conoceremos a las tres amigas (que no conocen sus aficiones) de Kirino, quienes le harán una visita a casa... en la cuál acabará pensando que ésta tiene algo con su hermano.

¡Hasta aquí puedo contar de este tomo! He intentado hacer lo posible por comentar todo sin destripar demasiado, pero hay detalles que hay que contar como la última parte, donde tras un "accidente", Kirino y su hermano acabarán de cierta manera haciendo pensar a las amigas de ésta que pueden estar juntos como más que hermanos, digamos.
Puntuación:
¡Gracias por leerme!